UN DOCUMENTO POCO CONOCIDO EN TEPA
POR JUAN RAMÓN ÁLVAREZ

Los Ángeles 7 de junio del presente. Gracias al encargado del archivo del congreso del estado de Jalisco don Hugo Verdín Preciado, tengo en mis manos un documento muy poco conocido en Tepatitlán. Se trata de una muy interesante declaración que se hizo en el mismo lugar de Los Altos de Jalisco en la primera mitad del Siglo XIX y justo después de una votación donde se eligió al gobernador.

El texto es un acta levantada en Tepatitlán inmediatamente después de la elección en donde se escogió a don José Antonio Romero como gobernador. El manuscrito comienza diciendo “En la villa de Tepatitlán a tres de noviembre de mil ochocientos treinta y cuatro…”

Al leer todo el texto se infiere que Tepa y otros varios lugares incluso algunos que ahora son parte de Nayarit como Acaponeta y Ahuacatlán sufragaron a favor del señor Romero. La colección de los dictámenes entonces levantados por las diferentes comarcas del territorio, concluyen que el pueblo jalisciense eligió al licenciado Romero para que condujera los destinos del ahora estado libre y soberano.

El manuscrito referente a Tepa, nos dice que “se procedió a la elección de gobernador que recayó en el Lic. Antonio Romero, con trece votos de otros tantos electores presentes”. (Así es, según se lee, fueron trece unánimes sufragios.)

Entre los ciudadanos votantes de la –villa de Tepatitlán- señalados en la misma acta, se encuentran el señor cura  don Juan José Paniagua, don Agapito Gómez, Juan Nepomuceno Gutiérrez, Trinidad Navarro y Antonio Fernández. La verdad me es muy difícil entender la caligrafía de aquellos años y por ello no menciono al resto de los ahí nombrados.

Al respecto y platicando por teléfono con el cronista de la ciudad don Francisco (Quico) Alcalá, el investigador me mencionó que él no tenía ni idea de la existencia del manuscrito. Luego incluso agregó que estaba seguro de que el resto de los historiadores del municipio incluyendo a personajes como don Paco Gallegos, tampoco tenían conocimiento de la citada crónica.

En conclusión tengo dos puntos 1) a la persona que me lo solicite, con mucho gusto comparto el documento que con tanta buena voluntad me proporcionó el señor Hugo Verdín Preciado encargado del Archivo del Congreso de Jalisco. Y 2) que por todas las razones especificadas, por ello digo líneas arriba que el documento es poco conocido en Tepa.

Amigo lector si usted difiere de la opinión de su servidor, yo quiero conocer la suya, gracias.